Con la llegada de la temporada invernal, el aumento de enfermedades respiratorias es una preocupación entre la población. Sin embargo, otro año más, la atención se centra en el COVID-19. Y es que en las últimas semanas se ha registrado un repunte de casos de coronavirus en diferentes partes del mundo, incluyendo España.
Tanto es así que el director general de la OMS, el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, advirtió hace unas cuantas semanas que la organización sigue «viendo tendencias preocupantes para el Covid-19 entre los países que reportan datos» y que «los niveles de vacunación siguen siendo preocupantemente bajos»: «Sólo dos tercios de la población mundial ha recibido una primera pauta de vacunación completa y sólo un tercio ha recibido la de refuerzo».
El repunte de casos surge por la relajación en las medidas de prevención. Muchas personas han dejado de usar mascarillas y de mantener la distancia social, lo que ha facilitado la transmisión del virus. Además, el aumento de la movilidad y la reapertura de ciertos sectores económicos también han contribuido a su propagación. A lo que hay que añadir la reducción de los efectos de las vacunas junto a la aparición de nuevas variantes. Causas que también pueden provocar este aumento en los casos de la infección.
Por otro lado, también hay que tener en cuenta que la cuarta dosis de la vacuna no fue tan extensa como las anteriores, lo que también puede ocasionar estos contagios actuales.
En cuanto a los síntomas, la Asociación Médica Estadounidense destaca síntomas comunes del COVID-19, como la tos, congestión respiratoria, fiebre, escalofríos, dolor de garganta, dolores musculares, vómitos y náuseas. Y, aunque sea menos habitual, , la pérdida del gusto y el olfato sigue siendo un síntoma relevante.
Ante esta situación, se enfatiza la importancia de buscar atención médica al presentar síntomas de COVID-19, para prevenir posibles complicaciones. En este caso destaca la atención por parte de un neumólogo y, en concreto, de un neumólogo coronavirus.
No olvidemos que el COVID fue una de las principales causas de muerte en nuestro país durante 2022. El año pasado fallecieron más de 464.000 personas, un 3% menos que en 2021. Y de ellas más de 31.606 lo hicieron por COVID-19. Aún así murieron casi un 20% menos de personas por esta causa que en 2021. Este grupo deja de estar así entre las cinco principales causas de muerte por primera vez desde 2020.
Ya, en este 2023, y durante los primeros seis meses, murieron un total de 3.760 personas por coronavirus, lo supuso un 82% por ciento menos respecto al mismo periodo del año anterior, según los datos provisionales que ha hecho públicos el Instituto Nacional de Estadística (INE).